miércoles, 25 de marzo de 2009

Apasionada por la Naturaleza


Parque Nacional Canaima, al Sur de Venezuela, en el Estado Bolívar. Es uno de los mayores atractivos turísticos del país, y solo se consiguen en este lugar del mundo. Se extiende sobre 30.000 km² hasta la frontera con Guyana y Brasil, por su tamaño es considerado el sexto parque nacional más grande del mundo. Cerca de 65 % del parque está ocupado por mesetas de roca llamadas tepuyes. Estos constituyen un medio biológico único, presentando también un gran interés geológico. Sus acantilados escarpados y sus caídas de agua (incluyendo el Salto Ángel, que es la caída de agua más elevada del mundo, a 978 m).
Este parque tiene dos sectores muy distintos. Al Este, el sector Oriental, en donde se encuentra la Gran Sabana y al Oeste, el sector occidental, en donde se encuentra el
Salto Ángel y la laguna de Canaima. En 1994 el Parque Nacional Canaima fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por ser una reserva natural que cuenta con relieves abruptos especiales y únicos en todo el mundo, los tepuy, que son especies de mesetas de miles de años de antigüedad, con paredes verticales y cimas casi planas.


Los tepuyes más conocidos son el
Monte Roraima, el más alto y fácil de escalar de todo el parque, y el Auyan-tepui, el más visitado, pues en este se encuentra la catarata o caída de agua más alta del mundo, el Salto Ángel.
Se dice que los tepuy son rocas areniscas y datan del período en que
América y África formaban un supercontinente. A este tipo de relieve se le conoce comúnmente como Macizo Guayanés.
El parque es hogar de los indígenas
Pemones. Estos tienen una relación con los tepuy, y creen en que son el hogar de los espíritus "Mawari". El parque está en un sitio lejano a la civilización. Cuenta con pocas carreteras que conectan con otras ciudades cercanas, como Ciudad Guayana. El medio de transporte más común para recorrerlo es a través de canoas.
Fauna:
Canaima posee una fauna muy variada, la cual está distribuida a lo largo del parque de acuerdo a múltiples factores ambientales como la altura y el tipo de vegetación. Entre las especies que podemos encontrar están:
Armadillo gigante (
Priodontes maximus)
Perro de agua gigante (Pteronura brasiliensis)
Oso hormiguero gigante (Myrmecophaga tridactyla)
Puma (
Puma concolor)
Jaguar (
Panthera onca)
Pereza de dos dedos (Choloepus didactylus)
Mono viuda (Pithecia pithecia)
Mono capuchino del Orinoco (Chiropotes satanas)
Roedor endémico del
tepuy Roraima (Podoxymys roraimae)
Marsupial endémico del tepuy (Marmosa tyleriana)
Águila harpía (
Harpya harpija)
Guacamaya enana (Ara nobilis)
Cotorra morada (Pionus fuscus)
Sapito minero (Dendrobates leucomelas)
Iguana Caribeña (
Iguana delicatissima)
Colibrí (
Trochilinae)
Diversas especies de Tucan (Género
Ramphastidae).
Entre muchas otras especies, incluso especies sin descubrir y que además son endémicas de la zona.

Flora:
Existen más de 300 especies endémicas solo en La Gran Sabana.

Géneros endémicos: Achnopogon, Chimantaea, Quelchia, Tepuia, Mallophyton, Adenanthe.
Abundantes especies insectívoras de los géneros: Bromelia, Drosera, Heliamphora, Utricularia.

Hidrografía:
El parque incluye la totalidad de la cuenca de la margen derecha del
río Caroní, y dos de los saltos de agua más altos del mundo, el salto Angel y el Kukenán y gran cantidad de cataratas de menor altura.
Relieve:
La única forma de relieve son los tepuyes, que son mesetas con características inigualables, entre las que destacan sus paredes verticales y sus cimas prácticamente planas, aunque hay varios tepuyes que no cumplen estas reglas. Geológicamente constituyen restos de una cobertura sedimentaria formada por arenisca muy antigua que se superpone a una base de rocas ígneas (granito, principalmente) que es aún más antigua (casi 3000 millones de años). Sobre sus cumbres habita una cantidad muy importante de especies endémicas muy específicas, tanto de vegetales como de animales. Algunas especies vegetales endémicas están categorizadas como "carnívoras", que encuentran de este modo, una provisión de alimentos (insectos, principalmente) que son tan escasos en las cumbres. Estas formaciones tienen una edad geológica que oscila entre 1500 y 2000 millones de años, lo que las convierte en unas de las formaciones más antiguas del planeta. Los tepuyes más conocidos son: el Auyantepuy (de donde se desprende el Salto Ángel), El Roraima, El Kukenan y El Chimantá entre muchos otros.

Experiencia personal

En diciembre decidí pasar unos días gratos en la Gran Sabana como lo he hecho años anteriores con la sorpresa de que este año no fue así, donde creí que todavía existía la majestuosidad de la vegetacion, libre de contaminación sentirte solo en medio de tanta belleza natural, en ese momento te sientes un grano de arena, de lo pequeños que somos dentro de este inmenso paisaje, no tengo palabras para decir lo que siento cuando te encuentras arropado por el universo, Sin duda estos parajes, confiscados por el tiempo y las condiciones adversas de sus climas han confeccionado un hábitat incomprensible a primera vista, al punto de parecer antagónico con la vida, pero en realidad en medio de esta inhóspita atmósfera se logra alzar con fuerza la vida, eso si, en una batalla comprometida con la subsistencia, con la austeridad de estas cumbres silenciosas así lo siento en aquel paisaje que te pierdes de vista y sentirte libre esto no lo consigues en ninguna parte del mundo a los que nos gusta la naturaleza, es contemplar cada segundo que estas allí, ¿porque no cuidar?, ¿en que colaboramos? me quede en el Salto Kama y fue muy triste como gente inconciente dejan la basura a orilla de la cascada, el recorrido que hice hasta Brasil, fue muy triste al ver basura en todo el trayecto, de regreso nos fuimos al pueblito el Paují, es una divinidad de paseo, te encuentras con un buen pedazo de carretera asfaltada y luego de tierra hasta llegar al pueblito, es impresionante como están deforestadas, increíble señores estamos acabando con la riqueza mas grande de Dios, que es la naturaleza, yo le hago un llamado a todos los que visitan esta belleza que nos traigamos nuestra basura, la Gobernación del estado Bolívar a colocado unos contenedores para depositar la basura y esa no es la solución.
¿Porque? Vienen los animales sacan todo y no estas solucionando nada, si fuéramos conscientes de todo lo que esta pasando con el medio ambiente, porque cada vez que visitamos un sitio de estos no dejamos plantado un árbol, la naturaleza te lo agradecería, pero no solo dejamos de hacerlo sino que también lo destruimos, la mano del hombre es el peor enemigo de la naturaleza y por ende la destrucción de si mismo.
Como siempre los viajeros lanzan sus porquerías por las ventanas como cosa rara, estamos poco a poco sacando a nuestros indígenas de su habitad sin ocuparnos en darles educación de conservación ambiental esto es muy grave, no podemos darle responsabilidad, eres tu el que tienes que colaborar con ellos, por favor, si no cuidamos este pedacito de reliquia que es único en el mundo lo perderemos para siempre, vamos a sentirnos orgullosos y crear conciencia.
Somos pocos los que velamos por la naturaleza, y muchos los que vienen a destruir lo poco que hacemos.

Venezuela es un país para hacer turismo, con sus playas, llanos, montañas, selvas, ríos de todos los tamaños, lugares impresionantes para vacacionar y conocer, para excursiones, expediciones.

Venezuela posee muchas riquezas turísticas, pero debemos conservarlas, protegerlas, preservarlas.

Turismo no es simplemente viajar de un lado a otro, no, también identifica la necesidad del respeto y la conciencia para entender lo importante de nuestros actos sobre el medio ambiente.

No podemos esperar por una ONG o por el estado, la solución esta en nuestras manos tu que fuiste, no botes tu basura a orilla de las cascadas o en los caminos, no es necesario llenar el parque de señalización si no vas a respetar las señales.

No estoy exagerando, señores si esto sigue así con el
tiempo no tendremos Gran Sabana.